Seleccionar el activo para realizar el análisis técnico: esto puede ser una acción, commodity o cualquier otro instrumento financiero.

Obtener un gráfico del activo: un gráfico es una representación visual de los precios y los volúmenes del activo a lo largo del tiempo. Existen varios tipos de gráficos disponibles, como los gráficos de barras, los gráficos de línea y los gráficos de velas, estos son nuestra primera información al momento de realizar nuestros análisis técnico.

Identificar patrones y tendencias: una vez que se tiene un gráfico del activo, se pueden buscar patrones y tendencias en el comportamiento del precio. Los patrones comunes incluyen las tendencias alcistas y bajistas, las líneas de tendencia, los triángulos, los canales, etc. Conocer cada uno de estos patrones es fundamental para realizar un análisis técnico.

Utilizar indicadores técnicos: los indicadores técnicos son herramientas utilizadas para medir ciertos aspectos del comportamiento del mercado, como la volatilidad, la fuerza del mercado, etc. Algunos indicadores técnicos comunes son el promedio móvil, el índice de fuerza relativa (RSI), el oscilador estocástico, entre otros.

Tomar decisiones: una vez que se han identificado patrones y tendencias, y se han utilizado indicadores técnicos para medir el comportamiento del mercado, se pueden tomar decisiones de compra o venta del activo. Una tendencia alcista indica una oportunidad de compra, mientras que una tendencia bajista indica una oportunidad de venta. Una vez que se toma una decisión, es importante establecer una estrategia de salida adecuada. Esto puede incluir establecer un objetivo de ganancias y un nivel de stop-loss para limitar las pérdidas en caso de que el mercado se mueva en una dirección inesperada.